Vocacion, un inscrito en el alma.
En cuanto a lo que vimos en clase, a lo que he tratado de leer un poco; he podido entender 2 cosas: la vocación es un llamado inscrito en el alma de cada uno de nosotros, algo que tenemos dentro; que podemos dirigirnos hacia ella de diversas maneras, oportunidades, realidad socio-económica, aptitudes, muy importante y fundamental, dedicación, esfuerzo.
Algo que si quedo en duda en mi es que si podemos tener muchas vocaciones, si alguien lee algo mas o sabría como responder mi duda; agradecería.
Mirko Oliva
Algo que si quedo en duda en mi es que si podemos tener muchas vocaciones, si alguien lee algo mas o sabría como responder mi duda; agradecería.
Mirko Oliva
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ResponderEliminarBueno a mi parecer y según también con lo que me he informado he podido entender que la vocación es algo con lo que se nace y según como vaya pasando el tiempo uno lo va descubriendo poco a poco ya que se conocen cosas nuevas en las que se despiertan intereses y así vas buscando información acerca de lo que gusta hacer. Al final el resultado sería encontrarla y esto significaría darle un sentido a tu vida en todos los ámbitos pero que en nuestro caso sería en el profesional ya que somos alumnos de arquitectura; además tener vocación implica también ser responsable y comprometido con lo que haces para así poder desempeñarte de la mejor manera y sentir gratificación por lo haces.
ResponderEliminarElaine Tovar
¿De qué manera podríamos relacionar a L. Hahn con el tema de la “Vocación”? Luego de haber visto el video “My architect” en el que Nathaniel Kahn (hijo de Louis Kahn) empieza a averiguar un poco más acerca de la vida de su padre tras su muerte. Nathaniel recurre a conocidos de su padre, personas que trabajaron con él, esposas y familias. Ninguno de ellos deja de relacionarse en ningún momento con su carrera: La arquitectura. Después de haber tenido varios de los pasajes y obras durante su vida, podemos ver que Louis encontró en la arquitectura su VOCACION, al extremo de descuidar, quizás, varios aspectos de su vida personal. En muchas de sus obras, la perfección está claramente reflejada, pero ¿Qué hay de su vida? Al parecer no pudo ser persistente con ninguna de las relaciones que mantuvo, a excepción de una; será que, ¿no encontraba su espacio? Al contrario, en sus obras te hacían sentir otra cosa, se iba más a lo espiritual, se podría decir que ¿encontraba en esas edificaciones un fluido de sí? ¿Un escape de la realidad en la que se encontraba?
ResponderEliminarPienso que, Louis en encontrar en la arquitectura su vocación, descuido muchas cosas de la vida. Podríamos afirmar que las cosas que te apasionan realmente siempre van a tener espacio a ser dadas.
Escrito por: Ana Gabriela Orihuela O’Brien